En la batidora, pongo la harina, el azúcar y la levadura instantánea, y mezclo la harina con el azúcar y la levadura instantánea. Ahora añado la sal. Luego, empiezo a añadir el aceite. Después, voy a añadir el agua poco a poco. Después de amasar bien la masa, la pongo en un bol, le echo aceite y la cubro con film transparente. Ahora la pongo en un lugar cálido, como un horno de gas, que tenga la luz encendida. Lo dejamos reposar de una hora a una hora y cuarto, hasta que fermente y doble su tamaño.
Ahora vamos a empezar a preparar el zaatar. Ponemos semillas de sésamo sobre el zaatar verde y lo mezclamos. Luego añadimos el aceite de oliva. Ahora el zaatar está listo para el manakish. La masa ha fermentado y ha doblado su tamaño, como podemos ver.
Empezamos a preparar el manakish. Cortamos la masa en tres trozos. Espolvoreamos un poco de harina. Empezamos a extender la masa. Si queremos que el manakish quede suave, la estiramos un poco gruesa. Si queremos que quede crujiente, la estiramos un poco fina. Así tendrá un grosor adecuado.
Empezamos a cortarlo en trozos grandes. Empezamos a cortarlo. Dejamos reposar el resto de la masa un poco y la amasamos de nuevo. Inmediatamente la colocamos en la bandeja que meteremos en el horno. Completamos toda la masa de la misma manera. Así es como se ve el manakish. Después de extenderlo, hice dos bandejas.
Ahora vamos a empezar a espolvorear tomillo y aceite de oliva por encima. Pondremos solo una cucharadita encima y empezaremos a extenderlo. Ahora meteré el manakish en el horno a 220 grados. Lo dejaré de 12 a 15 minutos hasta que esté cocido y los lados dorados. Volveremos a ver cómo se ve cuando esté listo. El manakish salió y reposó unos 18 minutos a 220 grados Fahrenheit. Lo dejaré enfriar. Así es como se ve el manakish de tomillo. Después de que se enfríe, lo servimos con verduras frescas como tomates, cebollas, pimientos y aceitunas. Tiene un sabor increíble y es muy fácil de hacer.