La tercera edición del Malbec de Selva, que tuvo lugar este fin de semana en Estancia La Soñada, no solo fue una fiesta para los sentidos, sino también una oportunidad para educar al público y desmitificar creencias alrededor del mundo del vino. Expositores de distintas regiones del país aprovecharon el encuentro para responder inquietudes frecuentes y compartir recomendaciones con los asistentes.