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El Valle indomito - la Llanura de los ebanos
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00:00En el corazón del Valle del Luangu, en Zambia, hay una amplia llanura rebosante de fauna.
00:12Es un pequeño barrio de lo más concurrido. En él vive una familia de facóqueros, una
00:20tropa de babuinos y una solitaria hembra de leopardo llamada Olimba.
00:30Durante unos pocos meses al año, se suman a sus filas centenares de tántalos africanos,
00:35que se agolpan en el pequeño grupo de ébanos que se erige en el centro de la llanura.
00:43Rica y fértil, la llanura es un lugar rebosante de vida nueva.
00:50Pero los depredadores también acuden, atraídos por la oportunidad de un almuerzo rápido y fácil.
00:56Para todos los que han nacido en la llanura de los ébanos, el paso a la edad adulta es todo menos fácil.
01:06El Valle Indómito
01:17La llanura de los ébanos
01:24Una pareja de tantalos africanos. Acaban de emparejarse y no se separarán de por vida.
01:42El macho refuerza el vínculo entre ambos, acicalándole cuidadosamente el plumaje a la hembra.
01:47Ella reacciona quedándose boquiabierta.
01:53Han regresado a los árboles que los vieron nacer hace tres años.
01:57Su árbol se alza en pleno corazón de la llanura de los ébanos.
02:16Un pastizal de 2.500 metros cuadrados, atravesado por un arroyo serpenteante y bordeado de bosques.
02:24En el centro, un bosquecillo de ébanos alberga la mayor colonia de tantalos africanos del mundo.
02:37Estos árboles son lo bastante altos como para disuadir el bosque.
03:07a la mayoría de los depredadores trepadores. Rodeados de llanura abierta, los tántalos
03:13pueden ver venir cualquier peligro.
03:15Estamos en febrero. Después de tres meses de lluvias, la llanura de los ébanos está
03:43salpicada de pequeños humedales superficiales. Y el arroyo central está crecido. Una legión
04:00de animales acude a darse un banquete entre la fértil vegetación.
04:13Para una joven pareja de tántalos africanos, es su primera temporada de cría, perfectamente
04:18sincronizada para coincidir con esta abundancia de alimento.
04:28Todo está rebosante de nueva vida. Al pie de los ébanos, los babuinos residentes encuentran
04:49cantidad de semillas con las que mantenerse ocupados. Los babuinos se reproducen durante
05:01todo el año, por lo que este grupo, de unos 60 miembros, se compone de machos y hembras
05:06de todas las edades. Son una especie social y pueden pasar hasta dos terceras partes de
05:20su día comiendo juntos. El macho alfa está al mando. Tiene reservada la mejor comida y
05:32el derecho a aparearse en prioridad con las hembras.
05:39Pero todos los machos compiten con fiereza por tales privilegios y su posición está continuamente
05:45en juego. Un macho rival de otra tropa se acerca al grupo, mostrando los dientes una señal
06:04de agresividad y fuerza. No es una amenaza que deba tomarse a la ligera. Si su desafío
06:15prospera y derroca al babuino jefe de su posición de autoridad, podría peligrar la última generación
06:22de babuinos. El nuevo babuino dominante podría matarlos para que las hembras volvieran a estar
06:30en celo. El macho alfa reinante y sus esbirros ponen en su sitio al contendiente con mano
06:50dura. Pero es solo cuestión de tiempo hasta que otro dé un paso al frente y le arrebate
07:02su título. Es difícil sacar adelante una familia en un lugar tan competitivo.
07:32Tampoco es todo coser y cantar precisamente para este tántalo africano macho. Tiene que
07:45tomar una decisión fundamental, un lugar en el que empezar a construir un nido. El espacio
07:52es un bien escaso. En ocasiones apenas hay más de un metro entre nido y nido. Cuesta encontrar
08:01un hueco que no esté ya ocupado. Al ser un arquitecto primerizo, que está aprendiendo
08:09sobre la marcha, todo es nuevo para él. Tiene que defender el lugar que ha escogido de todos
08:14sus congéneres deseosos de arrebatárselo. Tras deshacerse de su rival, puede concentrarse
08:25en sus quehaceres. Compartirá con su pareja la tarea de construir el nido y necesitará
08:33toda la ayuda que pueda encontrar. Para cuando los polluelos estén listos para abandonar
08:41el nido, medirán unos 750 centímetros. El nido tendrá que medir por lo menos un metro
08:48de ancho para poder alojarlos a todos. Eso quiere decir que tendrán que recoger muchos
08:55palos al pie de los árboles. Les puede llevar hasta 10 días construir un nido.
09:18La pareja primeriza nunca ha hecho esto antes y se muestran demasiado entusiastas con el
09:28tamaño de los palos. Esta rama es muy grande. Al tratar de llevarla a su nido, se le queda
09:41enganchada. Ni siquiera entre los dos la consiguen mover. Los pájaros más experimentados utilizan
09:59trozos más pequeños, aunque ello suponga hacer más viajes. Los fardos de mayor tamaño
10:06dificultan el vuelo. Es más difícil trabajar con ese exceso de equipaje. Los novatos casi
10:19han terminado de hacer su nido. Solo queda ultimar unos pocos detalles y la hembra podrá probarlo.
10:36Pronto pondrá dos huevos, que su pareja y él se turnarán para incubar durante los próximos
10:5430 días. Mientras en las alturas los tántalos africanos se preparan para la llegada de la
11:09nueva generación, en tierra ha aparecido una nueva familia en la llanura de los ébanos.
11:15Hace seis meses, esta hembra de facóquero dio a luz en una madriguera oculta en la linde
11:20de la llanura. Sus tres cachorros ya están completamente destetados. No son quisquillosos,
11:27ya que pueden comer de todo, desde hierbas y raíces hasta bulbos y vallas, pasando por
11:32cortezas de árboles jóvenes. No lejos, un viejo y solitario macho está pastando. Vive a su aire,
11:41ya que los machos y las hembras solo se juntan para aparearse. Durante el resto del año, algunos
11:47de los machos forman grupos de solteros, o al igual que este, permanecen solos. Se ha
11:52especializado en comer hierbas cortas, para lo que se arrastra por el suelo, valiéndose
11:57de sus articulaciones callosas y acolchadas. Los facóqueros también gozan de un excelente
12:03sentido del olfato, lo que les permite encontrar cosas que comer bajo tierra. Pero ahí no acaba
12:13el rango sensorial de los pequeños facóqueros. La hiena, camuflada con su pelaje monteado,
12:30despide un penetrante olor. Es un depredador peligroso. Podría liquidar sin mayor problema
12:42a un joven facóquero. El viejo macho no piensa ayudarles. Los machos no desempeñan ningún
12:57papel en la crianza de los jóvenes. Pero la madre es ferozmente protectora, y no le asusta
13:07pelear para defender a sus pequeños. Puede causar serios daños usando sus afilados caninos
13:19inferiores a modo de peligrosas armas. La hiena solitaria sabe que no es buena idea plantar
13:32cara a esta madre. En abril, la estación de las lluvias ha tocado a su fin. El arroyo
14:02que atraviesa la llanura de los ébanos se empieza a desecar, desvelando un profundo
14:07barranco. Y los pantanales temporales empiezan a retroceder.
14:17En las alturas, en la colonia de los tántalos africanos, los padres novatos han prosperado,
14:23tienen dos polluelos sanos y están creciendo rápido. A sus seis semanas de edad, estos
14:37hermanos ya pesan 30 veces más que cuando rompieron el cascarón. Y están más hambrientos
14:48que nunca. Para sus padres, es un trabajo inacabable. Tienen que descender constantemente a por provisiones
15:03de las lluvias al humedal anegado. El descenso del nivel del agua deja varados a un montón
15:11de peces.
15:41Incapaces de abandonar el nido, los polluelos siguen dependiendo de sus padres para todo.
15:52Exigen comida y agua a picotazos y se disputan las ofrendas regurgitadas.
16:01Entre los hermanos no reina el amor. La hermana mayor, más fuerte, se queda con la porción
16:09más grande. Pero los tántalos no están solos en los ébanos. En esta época del año, los
16:32árboles están cargados de frutos. Los jóvenes babuinos se ponen las botas.
16:39Pero para alcanzarlos, han de sortear a los agresivos polluelos. Se puede decir que el árbol
16:50está atestado.
16:53En el revuelo por expulsar a los babuinos, se produce una baja. Un joven polluelo, de sólo
17:13cuatro semanas de edad, se ha caído de su nido. Mientras sus padres estén fuera pescando,
17:25el pequeño estará a merced de los vecinos. Y su presencia no ha pasado inadvertida.
17:34El marabú africano puede medir hasta un metro y medio de alto. Corpulentos e intimidantes,
17:43estos pájaros, también conocidos como enterradores, son principalmente carroñeros. Pero también
17:50son oportunistas y no le hacen ascos a una presa viva. El tántalo africano herido le
17:56resulta apetecible. Todavía se protege intentando esquivar los ataques. Al marabú le resultará
18:13más cómodo esperar a que su almuerzo sea incapaz de defenderse. Pero el polluelo no está fuera
18:25de peligro. En esta época del año, toda suerte de aves de presa acuden a los ébanos,
18:34con la esperanza de cobrarse a los más débiles y vulnerables.
18:37Una joven águila marcial se abalanza directamente sobre la colonia, causando un buen alboroto.
18:52Un joven pigajo botinglero ha detectado al polluelo herido, aunque primero tendrá que sortear
19:10al marabú africano. Pero es un cazador consumado y no le tiene miedo al enorme pájaro. Todo
19:20almuerzo posible ha de disfrutarse con fiereza. Estos hermanos de seis semanas de edad todavía
19:28están a salvo en su nido, pero tienen que estar en alerta. Es un lugar precario donde
19:35criarse. Aún les queda un par de semanas antes de echar plumas y poder abandonar el
19:42nido. Incapaz de regresar a la seguridad de su nido, el polluelo que se cayó del árbol
19:57y se precipitó en el barranco no duró mucho. El joven pigargo botinglero termina alzándose
20:05con el premio. Aunque los pigargos se alimentan principalmente de pescado, no le hacen ascos
20:13a la carroña cuando se les presenta la ocasión. Pero al ser tan joven, ha de mostrarse cauteloso
20:20y se toma su tiempo. En tierra firme, corre el riesgo real de ser atacado por las hienas
20:28o los leopardos. Y desde el barranco, no tiene una vista despejada de su entorno.
20:33Mejor mudarse a otra parte. Pero el pigargo no está solo. Su vieja némesis, el marido
21:03carabó africano. Es experto en robar a los demás pájaros y todavía no ha renunciado
21:09a este bocado. Pero no se cobrará esta presa hoy.
21:16Los tántalos se disponen a pasar la noche. A unos cientos de metros en el bosque que
21:41bordea la llanura, una manada de perros salvajes descansan en el frescor del aire nocturno.
21:47Por lo general, cazan a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde. Pero
22:11son unos depredadores oportunistas. Y están oliendo algo. Son jugadores en equipo y siempre
22:27cazan juntos para batir presas lo bastante grandes como para dar de comer a todo el grupo.
22:32Un pucú de 60 kilos sería un buen trofeo.
22:39La velocidad máxima que pueden alcanzar los perros es de 60 kilómetros por hora. Son
22:55mucho más veloces que un pucú. Y también tienen resistencia. A menudo se cobran a sus
23:03presas, persiguiéndolas hasta agotarlas. Los perros salvajes son los cazadores con la
23:16mayor tasa de éxito de África. Pero el pucú se les escabulle. No hay tiempo para descansar
23:26y reagruparse. Un antílope jeroglífico, desvelado por el revuelo, brinda una segunda oportunidad
23:35a los perros. No es su noche de suerte. Hambrientos y cansados, poco pueden hacer los perros.
24:06Aparte de descansar. Y permanecer al acecho de la siguiente oportunidad.
24:22Las tinieblas sacan de sus escondites a los demás habitantes nocturnos de la llanura de
24:27los ébanos. La leopardo hembra olimba patrulla su territorio. Es una cazadora emboscada a
24:40la que le gusta hacer sus capturas por la noche, sorprendiendo a su presa sin darle tiempo
24:45a reaccionar. Pero puede que la mejor opción no sea un puercoespín que está comiendo tranquilamente
24:55unas raíces. Tiene el dispositivo de defensa perfecto contra todo agresor potencial.
25:02Sus punzantes púas miden más de 50 centímetros. La espalda está más densamente recubierta
25:19de unas púas rígidas y más pequeñas, de 20 centímetros de largo. Están hechas de
25:28queratina, la misma sustancia que el pelo, pero pueden propinar dolorosos pinchazos y
25:33se desprenden al contacto, quedando así clavadas en el atacante. La abezada olimba sabe que
25:41no le conviene dar caza a un almuerzo tan punzante. Y así, deja en paz al puercoespín.
25:56A unos 200 metros de distancia, al otro lado de la llanura, un tejón de la miel, hembra
26:02y su cachorro están atareados buscando larvas de insectos.
26:11Con tan solo ocho meses, el pequeño está plenamente desarrollado, pero permanecerá
26:17con su madre hasta bien entrado el año de edad. Tardará en perfeccionar la técnica de
26:23excavación que le sirve para capturar a sus presas.
26:32Los tejones de la miel pueden cavar hasta 50 agujeros en una sola noche en su búsqueda
26:37de insectos y pequeños roedores. Y el barro blando de la agostada llanura de los ébanos
26:45es el terreno de prácticas perfecto.
27:15Al alba, los perros salvajes tienen otra oportunidad de cavar.
27:34A plena luz del día, este antílope no tiene donde esconderse.
27:49A desayunar.
28:07El 80% de las cacerías de los perros salvajes tienen éxito, frente a tan solo un 30% en
28:13el caso de los leones. Se apresuran en comer, y con razón. Como buenas carroñeras, las hienas
28:23han seguido a los talentosos cazadores para arrebatarles la presa a la menor oportunidad.
28:29Se darán por satisfechos cuando hayan engullido hasta una quinta parte de su peso corporal,
28:344 kilos y medio de carne por cabeza. Les llevará 20 minutos.
28:47En mayo, la estación lluviosa no es más que un lejano recuerdo.
28:52Los humedales son más barro que agua, y el barranco se ha secado por completo.
28:57Los dos polluelos de Tántalo, que ya han cumplido dos meses, aún están a salvo en el árbol.
29:08Pero no por mucho tiempo.
29:12Han pasado estos últimos días preparándose para un importante hito en su vida,
29:17ejercitando sus músculos alares y disponiéndose para volar.
29:21Hasta el momento, sus padres lo han hecho todo por ellos.
29:33Pero hoy no pueden serles de ninguna ayuda.
29:37Ha llegado el momento de dar el primer paso hacia la independencia.
29:40La hembra parece más motivada que su hermano.
29:52Ha llegado a la copa del árbol.
29:56Ya no hay marcha atrás.
29:58Volar es la parte fácil, hasta para una principiante.
30:20El problema es el aterrizaje.
30:22Nada mal para ser una primeriza.
30:39A su hermano le pueden los nervios.
30:42Aún no ha reunido el coraje suficiente.
30:44Cada día son más los polluelos que alzan el vuelo.
30:55Tiene que aprender a volar lo antes posible.
30:57A la familia de facóqueros se ha sumado otra hembra junto con sus dos crías.
31:15La unión hace la fuerza y ahora las hembras adultas lo tienen más fácil para proteger a sus cachorros de los depredadores.
31:26En la tropa de 60 babuinos siempre hay cantidad de ojos y de oídos para asegurarse de que los bebés no se metan en líos.
31:44Siempre al acecho, el macho alfa ha detectado un problema.
32:01Olimba.
32:02Con sus llamadas de alerta, se asegura de hacer saber su presencia a todos los animales de la llanura de los ébanos.
32:22La hembra de leopardo es uno de los depredadores más temidos del vecindario y en todos infunde un temor reverencial.
32:29Prudentes, los facóqueros se apresuran en retirarse.
32:36Las hembras adultas pueden alcanzar una velocidad máxima de 55 kilómetros por hora,
32:42pero las cortas patas de los cachorros no les permiten correr tan rápido.
32:47Alzando el rabo, advierten a los demás facóqueros del peligro potencial.
32:52Hasta el más pequeño puede seguir así al resto, sin extraviarse entre las altas hierbas.
32:59Ahora que han descubierto su escondrijo, no tiene ya sentido permanecer aquí.
33:05Liberada de su nido, ya no hay quien le pare los pies al adolescente.
33:11Día tras día, practica en el aire.
33:15Dentro de un par de semanas, los tántalos abandonan el aire.
33:17Los tántalos abandonarán la llanura de los ébanos y se irán con la pesca a otra parte.
33:20Pero su hermano no parece tan seguro.
33:22Pero su hermano no parece tan seguro.
33:24Los tántalos abandonarán la llanura de los ébanos y se irán con la pesca a otra parte.
33:28Pero su hermano no parece tan seguro.
33:30Terminó por dar el salto al vacío y abandonó el nido.
33:32Pero su hermano no parece tan seguro.
33:34Pero en el aterrizaje, se hizo daño en una pata.
33:36No es el único que ha tenido un salto al vacío y abandonó el nido.
33:40Pero en el aterrizaje, se hizo daño en una pata.
33:42No es el único que ha tenido una crianza accidentada.
33:56Menos de una tercera parte de todos los polluelos de tántalo africano consiguen llegar a adultos.
34:02Muchos sucumben a los depredadores, el hambre y los accidentes.
34:18En un entorno tan competitivo como este, ya cuesta bastante sobrevivir cuando se está sano.
34:26Por lo que estando herido, es mucho más difícil.
34:30Aún queda polluelo cojo para rato, pero el enterrador ya está custodiando su nido.
34:42Y se le suma otro de los cazadores más mortales de la llanura de los ébanos, camuflado en el sotobosque seco.
35:00El pequeño tántalo herido sería una presa fácil para Olimba.
35:08Pero tiene la mirada puesta en un trofeo más grande.
35:11Un poco.
35:12Un poco.
35:13Un poco.
35:14Un poco.
35:16Un poco.
35:17Un poco.
35:18Un poco.
35:19Un poco.
35:20Un poco.
35:21Un poco.
35:22Un poco.
35:23Un poco.
35:24Un poco.
35:25Un poco.
35:26Un poco.
35:27Un poco.
35:28Un poco.
35:29Un poco.
35:30Un poco.
35:31Un poco.
35:32Un poco.
35:33Un poco.
35:34Un poco.
35:35Un poco.
35:36Un poco.
35:37Un poco.
35:38Un poco.
35:39Un poco.
35:40Un poco.
35:41Un poco.
35:42Un poco.
35:43Un poco.
35:45Ahora que el barranco se ha secado, es un gran escondite para acechar a sus presas.
35:57No tienen idea de que está allí.
36:14Tras dar caza a su presa, no se puede rezagar.
36:23Sola no podría plantar cara a un grupo de leones, de hienas o incluso de perros salvajes.
36:38Menos de una cuarta parte de las cacerías de los leopardos tienen éxito.
36:42Y no se puede permitir perder esta presa.
36:48Tiene que apresurarse a almacenarla en un árbol.
36:51Conforme avanza la estación seca, el pantanal anegado se va secando, convirtiéndose en un lugar ideal para que los más jóvenes ejerciten sus dotes pesqueras.
37:19Instintivamente, la hembra tantea el terreno con las patas, como para sacar a la superficie a los peces varados en el fondo.
37:35Nunca ha visto pescar a sus padres, ni se lo han enseñado.
37:47En vez de un pescado real, puede usar cualquier cosa, hasta una pluma, para practicar cerrando el pico lo más rápido posible.
37:54Pero aún no se ha independizado por completo.
38:05Para comer, sigue dependiendo de sus padres y regresa al nido todas las noches.
38:10Para su hermano herido, la cosa está más difícil.
38:24Incapaz de cargar demasiado peso en su pata herida, no puede sumarse a las prácticas de unas aptitudes que necesitará desesperadamente para sobrevivir por su cuenta.
38:34Y si no se le cura la pata, no podrá despegar ni volar nunca.
38:40La búsqueda de alimento lleva a la tropa de babuinos a un riachuelo situado al borde de la llanura, a más de un kilómetro de sus ébanos.
38:58Hay buenos pastos al otro lado.
39:06Solo hay un problemilla que solucionar antes.
39:10Y es que, aunque los babuinos saben nadar y estas aguas son superficiales, no dejan de ser lo bastante profundas para encerrar peligros.
39:19Sale a cuenta ser cauto.
39:23El gran macho alfa da el primer paso.
39:28Una hembra se muestra un poco más reticente.
39:41Mientras ella se decide, otro babuino se salta la cola.
39:52Ya más tranquilos, los demás cogen confianza.
39:58Pero este tumulto no ha pasado inadvertido.
40:17Y sigue habiendo un pequeño babuino en la orilla equivocada del río.
40:25Solo un último obstáculo por escalar.
40:55Esta vez ha tenido suerte.
41:07Y ha valido la pena.
41:08A finales de mayo, la joven hembra de Tántalo se encuentra fuerte y sana.
41:27Está lista para abandonar la llanura de los ébanos.
41:30Las provisiones están acabando aquí y ha llegado el momento de buscar un nuevo sitio donde pescar.
41:39Los polluelos alzan juntos el vuelo y se dirigen hacia el río.
41:49Pero ha tenido que dejar atrás a su hermano.
42:08Tenía la pata demasiado herida como para recuperarse.
42:14Y ahora que se han ido sus padres, no queda ya nadie para darle de comer.
42:20Los marabús africanos no tardan en disputarse sus restos.
42:27Sus ácidos gástricos son lo bastante potentes como para disolver el hueso.
42:32El joven Pigargo se acerca.
42:40Pero esta vez está en inferioridad numérica.
42:46Los enterradores pueden acaparar la carroña.
42:57En junio, los ébanos están despoblados.
43:18La adolescente ha llegado al río Luangua.
43:30Se encuentra cerca, pero es un importante primer paso lejos de casa.
43:36Sus padres también están aquí, pero ya no les incumbe cuidar de ella.
43:40Tiene que trabajar por su cuenta y sacarle partido a todas sus prácticas de pesca.
43:53Aunque no siempre es fácil distinguir las cosas en las turbias aguas.
44:10A sus tres meses, ya ha aprendido todas las aptitudes que necesitará para vivir lejos de la llanura de los ébanos.
44:19Es una superviviente.
44:26Pasará tres años sobrevolando el valle de Luangua,
44:30antes de regresar a los ébanos para encontrar pareja, construir un nido y fundar su propia familia.
44:40Ahora, los nidos están vacíos y la vida ha vuelto a la calma en la llanura de los ébanos.
44:57Durante la estación seca, los babuinos y los pacóqueros han de recorrer grandes distancias para encontrar comida,
45:06dejando a Olimba patrullando sola su territorio.
45:10Los tántalos africanos adultos tardarán nueve meses en volver para criar a su nueva nidada de polluelos.
45:19Mientras tanto, la calma reina en la llanura de los ébanos.
45:23A la espera de que vuelvan las lluvias, el arroyo vuelva a crecer
45:26y la estación de cría pueda comenzar una vez más.
45:30El arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos y el arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos.
45:42El arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos y el arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos.
45:52El arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos y el arroyo vuelva a crecer en la llanura de los ébanos.
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