Las cámaras del Aeropuerto Internacional Sheremétievo, en Moscú, Rusia, lo captaron todo. Un turista bielorruso se acerca disimuladamente a un niño, con cuidado de que nadie le observara. De repente agarró al pequeño, un niño de 18 meses, y lo lanzó bruscamente contra el suelo.
El hombre fue detenido in situ, pero el niño se encuentra en coma tras la fractura de cráneo que le produjo el brutal golpe.