En la jornada de ayer la expresidenta fue notificada de manera virtual que la condena a seis años de prisión comenzó a regir de manera oficial en su departamento ubicado en el barrio porteño de Constitución.
Si bien el juez le otorgó el beneficio del arresto domiciliario le impuso determinadas condiciones.
En ese marco, representantes del Partido Justicialista, militantes, organizaciones sociales y sindicatos se unirán para llevar a cabo marchas y manifestaciones para solidarizarse con la figura de la exmandataria.