El Senado argentino rechazó los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, propuestos por el gobierno de Javier Milei para completar la Corte Suprema. Este revés político, apoyado por sectores del kirchnerismo, macrismo y radicalismo, impide al Ejecutivo conformar su propia mayoría en la Corte. La situación genera incertidumbre sobre el futuro de García Mansilla, quien aún no ha renunciado a su cargo. El presidente Milei expresó su descontento en redes sociales, acusando a la oposición de pactar para bloquear sus propuestas judiciales. Este evento marca un precedente inédito en la historia reciente del país.