El Senado se prepara para una crucial votación sobre el futuro de García Mansilla, actual ministro de la Corte por decreto. La discusión se centra en la aceptación o rechazo del pliego del hijo de García Mansilla, lo que podría cerrar definitivamente el tema. En un contexto donde el gobierno enfrenta presiones tanto internas como externas, el rechazo del pliego podría dejar a García Mancilla desautorizado y sin posibilidad de continuar en su cargo. La situación genera incertidumbre política y podría tener repercusiones significativas en la composición futura de la Corte.