Completísima prueba del FIAT 500e 2021 en: https://bit.ly/3vojXUo
Maniobra de esquiva
Los resultados que hemos obtenido con el Fiat 500 en este ejercicio han sido muy buenos. Incluso en el primer intento, que realizamos sin conocer las reacciones del vehículo, los movimientos de la carrocería fueron suaves y progresivos y la sensación de seguridad al volante fue alta.
La velocidad máxima a la que conseguimos completar el ejercicio sin derribar conos fue de 75 km/h, que es un dato normal. Al igual que en la primera pasada, las reacciones fueron sencillas de controlar gracias al buen ajuste de la suspensión y de las ayudas electrónicas. El balanceo de la carrocería es moderado, pero los cambios de apoyo se suceden con mucha rapidez y de manera precisa.
Sucesivos intentos a mayor velocidad fueron infructuosos porque los neumáticos delanteros, unos Bridgestone EcoContact 6 de baja resistencia a la rodadura, deslizaban con claridad abriendo ampliamente la trayectoria marcada con el volante. No obstante, la sensación de control y seguridad percibidas en anteriores intentos, también quedaron patentes en estas pasadas.
Eslalon
En este ejercicio, el 500 es capaz de avanzar de manera fluida sin que las ayudas electrónicas tengan que actuar de manera evidente. Una vez más, el balanceo de la carrocería es moderado y los cambios de apoyo, ágiles. La dirección permite guiar bien el coche entre los conos, pero se echa en falta que proporcione un poco más de información sobre la adherencia de los neumáticos.
