La misión Solar Orbiter, liderada por la Agencia Espacial Europea (ESA), ha conseguido captar por primera vez en la historia imágenes directas de los polos del Sol, gracias a su nueva órbita inclinada fuera del plano eclíptico, revolucionando así la comprensión del campo magnético solar y del clima espacial.
El pasado 23 de marzo, la nave espacial observó el polo sur solar desde un ángulo de 17°, y en los próximos años alcanzará inclinaciones aún mayores, lo que permitirá obtener vistas sin precedentes de las regiones más misteriosas del astro rey.