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  • 22/5/2025
La noche del 15 de marzo de 2025, El Alcalde vivió una pesadilla: drones explosivos, minas, sicarios y campesinos atrapados. ¿Qué ocurrió realmente?

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Transcripción
00:00La calma en el alcalde, un pequeño poblado del municipio de Apatzingán, Michoacán, terminó
00:06de manera abrupta la noche del 15 de marzo de 2025. En ese lugar, donde el polvo de los
00:11caminos se levanta con el paso de caballos y las casas de adobe apenas resisten el tiempo,
00:16los perros callejeros dejaron de ladrar. Esa fue la primera señal de que algo no estaba
00:21bien, porque cuando ni los animales emiten un sonido, lo que se avecina es peor que cualquier
00:26tormenta. Aquella jornada pasaría a ser conocida por los vecinos como la noche de los drones.
00:32No fue un conflicto común, fue una batalla entre dos organizaciones criminales que se
00:36disputan el control del territorio, el cártel Jalisco Nueva Generación, CJNG y los caballeros
00:41templarios. Pero no se trató solo de balaseras, esta vez la tecnología bélica llegó hasta
00:47los rincones más olvidados del país. Drones sobrevolaron en la oscuridad y soltaron explosivos
00:52improvisados, minas enterradas bajo caminos de terracería y, en medio de todo eso, campesinos
00:58atrapados convertidos en escudos humanos en sus propias viviendas. Las calles del alcalde
01:03se vaciaron. De las 300 personas que lo habitaban, apenas unos cuantos ancianos se negaron a abandonar
01:09lo único que conocían como hogar.
01:11Si algo ha de pasarme, que sea en mi casa, decían con resignación. Los demás huyeron, desplazados
01:17por el miedo, por el terror que dejaron atrás los enfrentamientos de aquella noche.
01:21Don Ezequiel fue una de las víctimas de la violencia. A sus 71 años, fue golpeado con
01:26brutalidad por un grupo de sicillos que lo acusaban de ocultar información.
01:29¿Dónde está el jefe, perro? Le gritaban mientras lo arrastraban por el suelo de su
01:34tienda. Él, sin entender de qué hablaban, recibió patadas, insultos y humillaciones.
01:40Aquel localito de abarrotes, una estructura modesta en medio del polvo, terminó acribilado
01:44con la fachada llena de impactos de bala. Nada se salvó, ni él ni los perros del pueblo.
01:50Porque sí, antes de que cayera la noche y los drones comenzaran a zumbar en el cielo,
01:54los sicarios mataron a los perros callejeros. No fue un acto impulsivo, fue una táctica.
01:59Sabían que los ladridos podrían delatarlos. Y en medio del silencio artificial que impusieron,
02:04se desató el infierno. Lo más inquietante, según relatan los habitantes, que aún se atreven
02:09a hablar, es la sensación de haber sido utilizados. Sus casas fueron trincheras, sus cuerpos
02:14escudos y sus calles, campos de batalla. Para ellos, lo que antes eran herramientas para
02:19el trabajo o para la cosecha de limón, motor económico de la región, se convirtieron en
02:24elementos de supervivencia. Muchos agricultores ya estaban siendo extorsionados por ambos grupos,
02:29pagando cuotas para poder seguir usando el agua que el crimen controla, o simplemente para
02:35evitar represalias. El control de las tierras y el cobro de piso fue el detonante. Un conflicto
02:40que lleva años gestándose entre los jaliscos, como les llaman a los del CJNG, y los templarios,
02:46que se aferran al dominio de la región. Como un cáncer que avanza sin prisa, los
02:50hijos fueron tomando las colinas, agazapados, infiltrándose lentamente. Semanas después
02:56de los hechos, Don Ezequiel recorría nuevamente su calle, apoyado en un bastón, con la mirada
03:01cansada pero firme. No quería ser grabado, ni mucho menos fotografiado.
03:06Ya me humillaron una vez, no más, decía mientras inspeccionaba los daños de su tienda. En sus
03:12ojos aún se refleja el miedo, aunque tratara de disimularlo con palabras duras.
03:17Esos muchachos me trataron como un animal, como uno de los perros que mataron.
03:21Su testimonio, como el de muchos otros, pone en evidencia una nueva realidad. La guerra del
03:26narco ya no se libra solo con rifles. Los drones han cambiado las reglas, los artefactos
03:31explosivos vuelan silenciosos y caen sin previo aviso. Muchos campesinos describen esos drones
03:36como algo salido de una película futurista. Inconcebible en un rancho donde apenas hay
03:41motocicletas. La modernidad llegó, pero de la forma más perversa.
03:46En las semanas posteriores al ataque, los caminos seguían siendo un peligro constante.
03:51El 4 de abril, mientras un pequeño grupo encabezado por la maestra Carmen Cepeda, activista
03:56y regidora municipal, se dirigía a el alcalde. Un convoy militar les advirtió que acababan
04:02de desactivar dos minas en el trayecto. La advertencia fue clara.
04:06Pueden seguir, pero váyense con cuidado.
04:08Puede haber más. Las minas antipersonas, comunes en conflictos armados internacionales,
04:13ya están aquí, ocultas en caminos polvorientos, esperando que algún trascente o vehículo las
04:19detonen sin saberlo. El miedo no termina con el ruido de las balas.
04:23Permanece en el silencio posterior, en la incertidumbre de si el siguiente paso será
04:27el último. Una vez dentro del pueblo, el panorama no era más alentador. En las paredes se podían
04:33leer mensajes pintados que dejaban en claro quiénes mandan ahora. Las explosiones que
04:37se escuchan en los cerros cercanos eran como recordatorios constantes de que esa guerra aún
04:42no había terminado. Aunque la calle luciera vacía, aunque no se viera un alma, el peligro
04:47seguía ahí. Hoy, el alcalde es un pueblo fantasma. Una comunidad que, como tantas otras
04:53en Michoacán y en regiones de la llamada Tierra Caliente, ha sido devorada por una violencia
04:57que parece no tener fin. En estos lugares, ya no basta con cerrar la puerta con llave
05:02al caer la noche. El miedo entra por el aire, vuela sobre los techos, se oculta bajo la tierra.
05:07Y cuando los perros ya no ladran, es porque algo peor se aproxima.
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05:15¡Gracias!

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