A días del cónclave en el Vaticano, se intensifican los debates sobre el futuro de la Iglesia Católica. Por primera vez, tres corrientes principales emergen: progresistas, moderados y conservadores. El cardenal Pietro Parolin lidera a los moderados cercanos al Papa Francisco, mientras que Peter Erdó representa a los conservadores que buscan un retorno a las tradiciones. La figura de Francisco sigue siendo central, con opiniones divididas sobre sus reformas. El cardenal Gerhard Müller ha encendido la polémica al criticar la confusión generada por Francisco. La elección del nuevo Papa podría marcar un giro significativo en la dirección de la Iglesia.