En 1999 Elián González fue rescatado por pescadores de una endeble embarcación, luego de que su madre y otras 10 personas murieron ahogadas en su intento por llegar a Estados Unidos. Así comenzó su disputa legal con sus parientes en Miami que pedían que no fuese devuelto a la isla; ya que su madre, decían, había dado la vida para que Elián "creciese en libertad". Y su padre, Juan Miguel González, residente en La Habana y miembro del partido comunista. El caso se politizó y los grupos del exilio lo convirtieron en una bandera anticastrista y lucharon sin tregua ante los tribunales de EE.UU. para que el pequeño se quedase en el país. Sin embargo el tribunal falló a favor del padre y el departamento de justicia realizó un operativo relámpago tomando al niño, se lo entregó al padre y ambos regresaron a Cuba, siendo un fuerte golpe para la administración Clinton.