La directora del FMI, Kristalina Georgieva, desató una tormenta política al sugerir implícitamente apoyo al presidente Javier Milei en el contexto electoral argentino, declarando que es importante no descarrilarse de la intención de cambio durante una conferencia. Estas palabras fueron interpretadas como un respaldo al gobierno actual, provocando fuertes críticas de la oposición y expertos, quienes denuncian una anomalía. teleSUR