00:00Y dice lo siguiente, Venezuela rechaza la ridícula maniobra del saliente gobierno decadente de Chile ante la Corte Penal Internacional.
00:07La República Bolivariana de Venezuela rechaza categóricamente la absurda farsa del gobierno de Chile que pretende montar ante la Corte Penal Internacional,
00:15basada en mentiras y falsedades que solo existen en la imaginación de quienes han decidido hacer de la política exterior un espectáculo de mala calidad,
00:25siguiendo la línea política contra Venezuela del difunto Sebastián Piñera al mejor estilo pinochetista de creación de operaciones de falsa bandera.
00:35Pretender llevar un caso aislado, alimentado de patrañas, a la Corte Penal Internacional no solo es jurídicamente insostenible,
00:44sino que revela la supina ignorancia sobre el funcionamiento del sistema internacional y el Estatuto de Roma.
00:52La CPI no es un tribunal que ventila las fábulas fantasiosas de inverbes politiqueros, ni un escenario para montajes mediáticos.
01:02Es evidente que las autoridades chilenas no tienen la menor idea de cómo operan estos mecanismos,
01:08o peor aún, que simplemente están dispuestas a deformarlos para alinearse con intereses ajenos a la justicia.
01:18Avanza este comunicado en una segunda página.
01:21Esta posición no solo carece de fundamentos jurídicos, sino que sostiene de un odio vicioso contra Venezuela,
01:28evidenciando la desesperación por complacer agendas que le ordenan desde los Estados Unidos,
01:35que buscan erosionar la soberanía de los Estados.
01:39Chile, en lugar de prestarse para maniobras vergonzosas, debería enfocarse en sus propios y graves problemas internos,
01:48incluyendo la sistemática violación de los derechos humanos del pueblo mapuche y la represión de las protestas sociales.
01:56Venezuela es un país que puede dar lecciones sobre el respeto a los derechos humanos y la dignidad de los pueblos.
02:03No aceptamos ataques de quienes han hecho de la violencia institucional una práctica cotidiana
02:10y ahora intentan desviar la atención de sus propias miserias con burdas maniobras politiqueras.