La delantera española Jenni Hermoso testificó en el juicio contra Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), asegurando que no consintió el beso que recibió tras la final del Mundial Femenino 2023. "Sí, me sentí poco respetada. No busqué ese acto. Sentí rechazo hacia esa conducta", declaró Hermoso. "Manchó uno de los días más felices de mi vida". Rubiales, de 47 años, enfrenta cargos por agresión sexual y coacción. Los fiscales solicitan una pena de dos años y medio de prisión, una multa de 50.000 euros y la prohibición de ejercer cargos en el deporte. El incidente, ocurrido en la ceremonia de premiación del Mundial de Sídney, generó indignación en España y abrió un debate sobre el sexismo en el deporte. Hermoso reveló que se sintió presionada para defender públicamente a Rubiales, algo que rechazó hacer.