Aunque la vida digital nos mantiene conectados, desconectar de las redes sociales puede traer beneficios para la salud mental y el bienestar. 1. Menos estrés. Las redes sociales pueden ser una fuente de noticias e información negativa, que provoca estrés y ansiedad. Desconectar reduce la exposición a estos estímulos. 2. Más tiempo. Sin la distracción de las redes sociales, tienes más tiempo para actividades productivas y placenteras como aficiones, lectura y ejercicio. 3. Mejores relaciones. Centrarse en las interacciones cara a cara mejora la calidad de las relaciones con amigos y familiares. El contacto visual es insustituible. 4. Mayor productividad. La ausencia de notificaciones y distracciones digitales te permite centrarte en tus tareas, aumentando la eficiencia y la productividad en el trabajo o en los estudios. 5. Mayor autoestima. Las constantes comparaciones en las redes sociales pueden afectar a la autoestima. Desconectar ayuda a reducir esta comparación y cultivar una imagen más positiva de uno mismo. 6. Calidad del sueño. El uso de dispositivos electrónicos antes de acostarse interfiere en la calidad del sueño. Desconectar mejora el descanso y la salud general. 7. Más privacidad. Si te desconectas, reduces la cantidad de información personal que compartes, protegiéndote a ti y a los tuyos.