Ábalos (PSOE) se enfrenta a su muerte política por el 'caso Koldo': ¡Vean cómo de chulo se pone en laSexta!
- hace 2 meses
En un país que se precie de ser tajante contra la corrupción, Ábalos ya habría dejado de ser diputado.
Pero en la España de Pedro Sánchez, ese presidente que entró por la gatera de una moción de censura afeando a Mariano Rajoy el 'caso ''Gürtel', resulta que ya no hay problema en tener dentro del PSOE a alguien vinculado a prácticas escasamente higiénicas.
Pero el exministro de Transportes y actual parlamentario en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo no piensa abandonar su escaño a pesar de que el 'caso Koldo' se engrandece a cada momento.
En 'laSexta Xplica' se despachó a gusto y mostró su cara más soberbia cuando justificó las razones por las cuales no iba a dejar su mullido sillón en la Cámara Baja:
Yo creo que antes de llegar a eso, a esas respuestas, hay que ponerse en antecedentes, ¿no? Y la pregunta es ¿por qué? ¿no? Porque efectivamente, a partir de ahí, de una circunstancia se establece una decisión. Yo soy diputado ahora, no soy ministro. Si esto se hubiera producido yo siendo ministro, es evidente que tendría que haber dimitido en el momento. Más allá de tener responsabilidades de cualquier tipo. Cualquiera sería suficiente para dejar de serlo. Soy diputado ahora. Por lo tanto, en el ámbito de mis funciones, no tengo ninguna responsabilidad sobre eso. En el ámbito de mis funciones.
Dejación de responsabilidades
Igualmente, el exministro de Transportes dejó claro que él no vigiló quiénes formaban parte de su equipo y que tampoco se preocupó en demasía por lo que le decían sobre determinados miembros como el propio Koldo García:
Hay casos de gobiernos en este país que la mayor parte de sus miembros han sido afectados y ninguno de los presidentes ha cumplido con esa responsabilidad. Y hoy actúan de gurús de la ideología de la derecha. Por lo tanto, claro, pero oiga, ¿qué usted cree que yo no me he preocupado de esas cosas? Dentro de lo que puedes, porque tienes un equipo muy grande de personas, que te tienes que dejar a ser ministro también, no investigar a tu gente, pero aún así procura seguirlo. Y tienes que creer a veces lo que te dicen. El problema es que cuando a veces pides explicaciones de una cosa, lo decepcionante es encontrarte otra.
Pero en la España de Pedro Sánchez, ese presidente que entró por la gatera de una moción de censura afeando a Mariano Rajoy el 'caso ''Gürtel', resulta que ya no hay problema en tener dentro del PSOE a alguien vinculado a prácticas escasamente higiénicas.
Pero el exministro de Transportes y actual parlamentario en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo no piensa abandonar su escaño a pesar de que el 'caso Koldo' se engrandece a cada momento.
En 'laSexta Xplica' se despachó a gusto y mostró su cara más soberbia cuando justificó las razones por las cuales no iba a dejar su mullido sillón en la Cámara Baja:
Yo creo que antes de llegar a eso, a esas respuestas, hay que ponerse en antecedentes, ¿no? Y la pregunta es ¿por qué? ¿no? Porque efectivamente, a partir de ahí, de una circunstancia se establece una decisión. Yo soy diputado ahora, no soy ministro. Si esto se hubiera producido yo siendo ministro, es evidente que tendría que haber dimitido en el momento. Más allá de tener responsabilidades de cualquier tipo. Cualquiera sería suficiente para dejar de serlo. Soy diputado ahora. Por lo tanto, en el ámbito de mis funciones, no tengo ninguna responsabilidad sobre eso. En el ámbito de mis funciones.
Dejación de responsabilidades
Igualmente, el exministro de Transportes dejó claro que él no vigiló quiénes formaban parte de su equipo y que tampoco se preocupó en demasía por lo que le decían sobre determinados miembros como el propio Koldo García:
Hay casos de gobiernos en este país que la mayor parte de sus miembros han sido afectados y ninguno de los presidentes ha cumplido con esa responsabilidad. Y hoy actúan de gurús de la ideología de la derecha. Por lo tanto, claro, pero oiga, ¿qué usted cree que yo no me he preocupado de esas cosas? Dentro de lo que puedes, porque tienes un equipo muy grande de personas, que te tienes que dejar a ser ministro también, no investigar a tu gente, pero aún así procura seguirlo. Y tienes que creer a veces lo que te dicen. El problema es que cuando a veces pides explicaciones de una cosa, lo decepcionante es encontrarte otra.