A Child's Impulse (El impulso de una niña) [1910]

La Sra. Thurston, una viuda socialmente ambiciosa, está celebrando una de sus famosas fiestas bohemias. A estas funciones están invitados los protagonistas famosos de diversas profesiones. En esta noche en particular, está especialmente poseída por el hastío, hasta que aparece Raymond Hartley, un soltero adinerado joven, que es introducido en el círculo por un periodista. Inmediatamente surge un vínculo entre la viuda y Raymond, y debe decirse que este último es más sincero que el primero, porque Raymond la llama y le propone matrimonio, que ella está muy dispuesta a aceptar. Sus amigos, sin embargo, al enterarse de la gravedad de la situación, le advierten contra ella, acusándola de ser una coqueta. Él, por supuesto, no lo creerá hasta que él mismo descubra más tarde que su acusación es cierta. Su amigo le sugiere irse al campo unos días para curarlo de este siniestro enamoramiento. Seleccionar un lugar tranquilo y ordenar al ayuda de cámara que mantenga en secreto su paradero. Casi a su llegada conoce a Grace, la hija del granjero. Sus modales sencillos, ingenuos y con su belleza rústica, lo cautivan y lo hacen olvidar por completo a la viuda. Ahora experimenta un amor más elevado y sincero, por lo que le envía un mensaje a su ayuda de cámara para que le envíe sus baúles, ya que tiene la intención de prolongar su estadía indefinidamente, y luego le propone matrimonio a Grace y obtiene el consentimiento de ella. La viuda, mientras tanto, se ha inquietado, ya que está más ansiosa por esa rica pareja, al darse cuenta de lo que haría con la riqueza de Raymond. En su residencia recibe poca información del ayuda de cámara, pero al ver el baúl etiquetado, toma con astucia nota de la dirección. Ella va en su auto y localiza a Raymond al borde de la carretera en un estado de euforia por sus perspectivas. Fingiendo estar enferma, despierta su simpatía y pronto el viejo enamoramiento se apodera de nuevo de él. De regreso a la ciudad, regresa con la viuda, después de enviar una nota a Grace de su partida. Qué sorpresa es esto para la pobre chica y su hermana pequeña, aunque no entiende muy bien por qué, siente que el regreso de Raymond es urgente. Han llegado los baúles y el la pequeña encuentra intacto el talón de devolución. De la hucha de uno de sus juguetes, extrae sus ahorros y descubre que tiene suficiente para pagar el pasaje a la ciudad. Ella comienza subrepticiamente haciendo creer a un policía que está perdida, y este la dirige hasta Raymond, cuyo ayuda de cámara le comunica que está en casa de la viuda. La niña entra en medio de una reunión bohemia. La mirada en el dulce rostro de la niña, contrasta con las facciones que rodean a Raymond, y el sonido de una palabra de su súplica, es suficiente para decidirlo, por lo que toma a la niña en sus brazos y sale corriendo del lugar, apartando a a viuda, que pretendía detenerlo. De regreso a la granja, se apresura y se arroja suplicante a los pies de la pobre Grace, que tiene el corazón destrozado.