El déficit nutricional en Venezuela ha aumentado un 15% en los últimos meses; la escasez y la inflación disparada impiden que miles de venezolanos llenen sus despensas. La proporción total de niños menores de cinco años con déficit nutricional se elevó desde un 54% en abril hasta un 68% en agosto pasado. Según Cáritas, cada semana mueren seis bebés por desnutrición.