Una banda está operando por teléfono mediante una propuesta aparentemente altruista: donarte 25 laptops y cinco tabletas para que las entregues a estudiantes pobres. Para concretar la entrega, solicitan que ayudes a completar el pago del envío a través de una reconocida empresa de courier.
El pasado viernes 1 de agosto, la banda logró estafar a dos personas por un monto cercano a los 20 mil pesos en menos de 10 minutos, gracias a una labor previa de inteligencia en la que investigan cuidadosamente a sus posibles víctimas.
La mecánica es sencilla: investigan —presumiblemente mediante redes sociales— quién es la víctima, a qué se dedica, cuál es su profesión y su inclinación a ayudar.
El primer contacto llega mediante un mensaje de WhatsApp como este:
“Buenas tardes, José, ¿cómo estás? Bendiciones para ti y para toda tu familia. Soy el Dr. López, del Presbyterian en Nueva York. José, estoy en República Dominicana, ¿te puedo llamar?”