En la comunidad de Usthejé, en Ixmiquilpan, Hidalgo, un grupo de artesanos otomíes ha encontrado en la lechuguilla —también llamada ixtle— una alternativa de vida.
Con pocos recursos y apoyos cancelados desde 2018, 12 personas crearon una cooperativa que elabora rosarios, cruces, llaveros, estropajos y hasta árboles de Navidad con esta planta del semidesierto.
Antes sólo vendían fibra a granel. Ahora, pese a las dificultades, fabrican piezas únicas que venden en tianguis y ferias artesanales… aunque muchas veces, sin ventas.
La mitad de su producción aún va a parar a intermediarios que compran barato. Hoy, sus integrantes piden al gobierno federal que se reactiven los apoyos.
🔗 Lee la nota completa en La Jornada: https://www.jornada.com.mx/2025/07/22/estados/027n1est 📌 Síguenos para más historias de resistencia y trabajo digno.
00:30Nosotros tratamos de cuidarlo y entre más estamos tratando de reforestar, de meter más plantas de todo lo que se pueda en cada terreno. 250 hectáreas que estamos reforestando o hemos reforestado.
01:00Nos sobra bastante materia prima, pero estamos trabajando lo poco que se puede y eso es lo que quisiéramos. Ojalá un día lograr trabajar toda la materia prima.