Harto de que le roben constantemente, el dueño de un comercio increpó al ladrón y le dio a elegir entre dos opciones: llamar a la policía y denunciarlo o desistir de ello con la condición de que mantenga limpio el ingreso al supermercado por el lapso de una semana.
Las imágenes de las cámaras de seguridad dejan en evidencia la decisión del mechero.