La voz de quien fuera el criminal más buscado del país apenas se escucha. Está en el suelo, con el rostro pegado al cemento y una pistola de un militar apuntándole a la nuca. La escena, filmada por los propios soldados que lo detuvieron, marca el fin de una cacería que duró 17 meses y desnudó las vulnerabilidades del sistema penitenciario y de seguridad de las cárceles ecuatorianas. José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, líder de la organización criminal Los Choneros, fue recapturado este martes 25 de junio en Manta, la ciudad portuaria donde nació, a unos 400 kilómetros de Quito. Estaba escondido en un búnker camuflado en una vivienda del centro urbano, según la información preliminar difundida.