En medio de una noche nostálgica y con un Auditorio Municipal que lució a reventar con más de 5 mil aficionados, el Hijo del Santo se despidió de Tijuana tras más de 40 años de carrera arriba de los cuadriláteros.
El luchador se presentó acompañado de su heredero, Santo JR., quien ahora será el encargado de continuar con la leyenda del Enmascarado de Plata