“Chespirito y su elenco, en una entrevista histórica en Venezuela (1977)”
En 1977, el fenómeno televisivo de Chespirito cruzaba fronteras a pasos agigantados. Mientras millones de niños y adultos en América Latina seguían fielmente las desventuras de El Chavo del 8 y El Chapulín Colorado, el elenco encabezado por Roberto Gómez Bolaños realizaba una gira por la región que los llevó hasta Venezuela.
Fue en ese contexto que el periodista chileno Francisco Castillo, enviado de TVN Chile, realizó una entrevista que con los años se convertiría en un documento invaluable para los fans y estudiosos de la historia de la televisión. El encuentro se produjo durante una pausa en la exitosa gira venezolana del grupo.
En la entrevista, que hoy puede verse digitalizada, vemos al elenco completo: Gómez Bolaños, Florinda Meza, Ramón Valdés, Carlos Villagrán, Rubén Aguirre, Edgar Vivar y María Antonieta de las Nieves, mostrando un rostro mucho más humano y cercano, lejos del maquillaje y las carcajadas del set.
Con la serenidad que lo caracterizaba, Chespirito explicaba la génesis de sus personajes: “provienen de la calle, de mis hijos, de la vida cotidiana”, decía. Su concepción del Chapulín Colorado era especialmente reveladora: “un héroe auténtico, que tiene miedo, es torpe… pero se enfrenta al peligro de todos modos”.
Uno de los momentos más entrañables fue protagonizado por Ramón Valdés (Don Ramón), quien, al creer que el periodista era venezolano, mandó afectuosos saludos a Caracas, para luego corregirse entre risas.
Por su parte, Carlos Villagrán no dudó en atribuirle todo el mérito creativo a Chespirito: “él es dueño de todos los personajes, nosotros ponemos el corazón y el cariño”.
También se despejaron curiosidades que todo fan había tenido: el chipote chillón era un juguete real, mientras que la famosa chicharra paralizadora fue un invento original del equipo.
El detalle que unía a todos: la coincidencia intencionada de que los personajes más icónicos tuvieran nombres que comenzaran con “Ch…”.
Hoy, esta entrevista es más que una anécdota. Es una cápsula del tiempo que muestra el apogeo del equipo de Chespirito, en un momento de total armonía y éxito, justo antes de las tensiones y cambios que marcarían el devenir del programa en los años siguientes.
Un encuentro que no solo emociona a los nostálgicos, sino que confirma la enorme influencia cultural de este pequeño gran universo creado por Roberto Gómez Bolaños.
