Reino Unido evalúa la castración química para los agresores sexuales. Con el objetivo de reducir la población carcelaria hasta 2028, Reino Unido evalúa implementar la castración química obligatoria para agresores sexuales. La estrategia contempla liberar a miles de reclusos con buen comportamiento tras cumplir solo un tercio de sus condenas, independientemente del tipo de delito. Esto permitiría que agresores sexuales con penas menores a cuatro años también accedan a esta medida.