Con máximas cercanas a los 40 grados, Madrid ha vivido un fin de semana de tórrido calor. Afortunadamente a partir del martes, los termómetros bajarán y se esperan chubascos y tormentas con fuertes vientos a partir del miércoles. Se recomienda llevar siempre agua y salir a la calle con la cabeza protegida del sol, para evitar accidentes por choque de calor