El gobierno de la 4T podría tener en China a un aliado inmejorable para sacudirse los temores de dependencia de los Estados Unidos.
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00:00La guerra comercial entre los Estados Unidos y China ya escaló y fuerte al terreno de las
00:18inversiones. Durante los últimos años, el dinero que venía de China para ser invertido
00:23en Norteamérica creció exponencialmente hasta alcanzar los 46.500 millones de dólares tan
00:30solo en el 2016. Pero los forcejeos entre Washington y Beijing colapsaron la confianza y al cierre
00:36del 2018, la inversión china en Norteamérica cayó 88% para alcanzar apenas los 5.400
00:44millones de dólares, un desplome brutal. Por supuesto que en alguna medida la caída
00:50obedece a una desaceleración de la economía china. Pero sin duda la causa mayor es el
00:55odio que el gobierno del presidente Donald Trump está creando entre los norteamericanos hacia
01:01todo lo que vuela a China. Fuimos de los primeros en advertir aquí que la guerra entre Estados
01:06Unidos y China es tecnológica y que la Casa Blanca y Silicon Valley están alarmados por
01:12los avances chinos en las tecnologías del 5G que dominarán el mundo digital en los próximos
01:18años. El fallido boicot a Huawei es el mejor ejemplo. La pregunta ahora es, ¿qué está
01:24haciendo México para atraer algunos de esos miles de millones de dólares de inversiones
01:28chinas que ya no están encontrando acomodo en los Estados Unidos? Por supuesto que es
01:34entendible que teniendo a los Estados Unidos como el primer socio comercial, el gobierno mexicano
01:39extreme precauciones para no dañar la relación. Diplomacia comercial. Sobre todo cuando a pesar
01:45de los intentos de Trump de sabotearla con las amenazas de la cancelación al Tratado de
01:50Libre Comercio, en nada se altera el superávit que tenemos con el vecino del norte. El inquilino
01:56de la Casa Blanca sufre porque no entiende cómo a pesar de sus ataques furibundos seamos
02:01capaces de venderles más de lo que les compramos. Pero aún con una relación tan sólida, tendríamos
02:07que estar más que alarmados de que el 73% de nuestras exportaciones tengan como destino
02:12final los Estados Unidos. Para cualquier nación eso sería una bendición. La vecindad geográfica
02:19y el TLC, hoy rebautizado como T-MEC, consolidó los lazos comerciales para una auténtica integración
02:26también con Canadá, y es algo que debemos cuidar con pinzas. Pero al mismo tiempo se
02:31vuelve un peligro, sobre todo cuando vemos la dependencia que México viene creando en
02:36sus importaciones de gasolina, de gas y de alimentos básicos como maíz, trigo y sorgo.
02:42Nunca para un ser humano, una familia o una organización es buena la dependencia de un
02:47solo proveedor. La diversificación no solo es sana, es indispensable para no ser presa
02:53de un secuestro económico. Imaginan si mañana se levanta el presidente
02:57Trump de malas y decide que como no estamos haciendo el esfuerzo suficiente para combatir la
03:02migración centroamericana, nos va a racionalizar los envíos de gasolinas, de gas o de granos,
03:08nos paralizarían. Por eso insistimos en voltear hacia China, porque además de ser la economía
03:14de mayor crecimiento global en las últimas dos décadas, aún con la desaceleración puede
03:19convertirse en un justo equilibrio comercial frente a la dependencia norteamericana. Hoy enviamos
03:25a China apenas el 2.1% de nuestras exportaciones, el mismo nivel de comercio que tenemos con Alemania.
03:31Pero en importaciones, el 15% de lo que compramos en el extranjero ya viene de China. ¿Podríamos
03:38buscar un mejor balance? Alfonso Romo, Graciela Márquez y Marcelo Ebrard tendrían la última
03:44palabra. Pero sobre todo hay que trabajar para que nos vean desde el lejano oriente como una
03:49opción apetecible para invertir los más de 40 mil millones de dólares que dejaron de
03:54enviar anualmente a los Estados Unidos. El gobierno de la Cuarta Transformación podría
04:00tener en China a un aliado inmejorable para sacudirse los temores de dependencia de los
04:05Estados Unidos. Al menos para comprar un seguro, mientras Trump despache en la Casa Blanca.