Saltar al reproductorSaltar al contenido principalSaltar al pie de página
  • 8/6/2025
En México, si alguien da la cara por Donald Trump es Luis Videgaray, pero la crítica más severa es su exceso de tolerancia hacia los insultos del presidente de Estados Unidos

Categoría

🗞
Noticias
Transcripción
00:00Si alguien en México da la cara por Donald Trump, ese es Luis Videgaray, el secretario
00:18de Relaciones Exteriores y hombre de todas las confianzas del presidente Enrique Peña
00:22Nieto, digiere zapos y culebras para sacar adelante su controvertida vinculación con
00:27el presidente de los Estados Unidos. Pagó los platos rotos de la anticipada visita del
00:32candidato Trump, en una decisión que entonces le costó su posición como secretario de Hacienda
00:37y acabó reivindicado tras la sorpresiva victoria del excéntrico empresario, gracias a las buenas
00:42relaciones que Videgaray tejió con el yerno Jared Kushner. A partir de entonces fue llamado
00:48a dirigir la política exterior mexicana para manejar las espinosas relaciones con un presidente
00:53anti-mexicano, ávido de deportar dreamers y levantar un gran muro en la frontera. Desde
00:58entonces una de las críticas más severas a la gestión de Videgaray en Tlatelolco es
01:03su exceso de tolerancia hacia los insultos que Trump nos propina a los mexicanos. Pero
01:08más allá de lo que se sienta, lo que se ve en la Secretaría de Relaciones Exteriores
01:12es una absoluta complacencia y complicidad hacia las políticas de la administración Trump,
01:17no solo hacia Latinoamérica, sino para con el mundo entero. Apartándose de la tradicional
01:23política de no intervención, Videgaray fue presto para condenar al gobierno del dictador
01:27Nicolás Maduro. La lectura continental es que México se alquiló de escudo para articular
01:33una estrategia de presión sobre Venezuela, buscando que la abierta condena cundiera en
01:37el resto del continente. Pero más tarde el porrismo de nuestro país se volvió global, cuando México
01:43fue la primera nación en anunciar la expulsión del embajador de Corea del Norte, como protesta
01:48por sus ejercicios nucleares. Ni Perú, ni Chile, ni Argentina, ni Brasil se sumaron
01:53a esa línea que venía dictada desde el gobierno de Trump. Y México debutó como
01:58mini guarura, desafiando en solitario al dictador de una nación beligerante y nuclear.
02:03Pues todos esos servicios para con Trump y familia valieron de muy poco esta semana, cuando
02:08el presidente de los Estados Unidos convocó a Nueva York a los líderes latinoamericanos
02:12a una comida. Debido al terremoto del 9 de septiembre, el presidente Enrique Peña Nieto
02:17se disculpó de asistir al conclave anual de jefes de Estado y envió en su lugar al
02:22canciller Videgaray. Pero el secretario de Relaciones Exteriores, que más sirve a los
02:26propósitos de la política trumpista, fue excluido de la lista de invitados a la comida
02:31convocada por su amigo, el inquilino de la Casa Blanca. Y ese desaire solo puede explicarse
02:37desde una de dos ópticas. O Trump ya siente la política exterior mexicana como territorio
02:42propio y no necesita convocar a sus líderes a dialogar, como al resto de los jefes de
02:47Estado del continente. O Trump y familia ven al canciller Videgaray como un empleado al
02:52servicio de sus intereses, en cuyo caso aplican la máxima de que los patrones y los empleados
02:57no se sientan a la misma mesa. Sea cual fuere la respuesta, no es buena para el canciller
03:03Videgaray, que tanto apostó a los Trump, aún a costa de su imagen. Y menos buena es
03:09para México, que pierde respeto y estatura ante los ojos de un mundo que no entiende cómo
03:14le enmendamos la plana a un insensible que anuncia ante la ONU la aniquilación total de
03:19Corea del Norte y llama públicamente a su dictador, Mr. Rocket Man. Difícil entender
03:26por qué nos alquilamos como la trompeta de quien quiere llevar al planeta al armagedón.
03:33Gracias.
03:34Gracias.
03:35Tranquilo con un saludo
03:36La Promin產 primera season

Recomendada