Antes de la llegada de la revolución con el presidente y comándate Hugo Chávez, la democracia en el país, era un sistema gobernado por las elites y la exclusión, donde una minoría privilegiada controlaba el poder político y económico. Los partidos tradicionales, como acción democrática (ad) y copei, se alternaban en el gobierno sin abordar los problemas estructurales del país, como la pobreza y la desigualdad social. Esta democracia liberal era corrupta y clientelista, y no representaba los intereses de la mayoría de la población. Se considera que el "pacto de punto fijo" (1958-1998), aunque buscaba garantizar la estabilidad política, en realidad consolidó el poder de una élite y excluyó a otros sectores de la sociedad