En un impactante descubrimiento, las autoridades han desmantelado una secta rusa en Bariloche, liderada por Konstantin Rudnev, un hombre de 57 años con un oscuro historial criminal. Rudnev, conocido por sus afirmaciones de poderes sobrenaturales y conexión con seres alienígenas, ha sido acusado de abuso sexual y trata de personas. La investigación reveló que las víctimas eran sometidas a condiciones inhumanas en cabañas aisladas. El caso ha generado conmoción debido a la gravedad de los delitos y el misterio que rodea el paradero de varios niños nacidos dentro del grupo.