Badajoz ha amanecido consternado por la muerte violenta de una educadora por parte de tres menores en un piso tutelado. La mujer, de 35 años, ya había denunciado en varias ocasiones a los jóvenes, de entre 14 y 15 años, que han sido arrestados en Mérida. Los compañeros de la trabajadora social están consternados por la noticia y critican la situación en la que trabajan: "Cada vez los menores son más agresivos y pedimos que estemos más protegidos, que haya más medidas de seguridad y más personal para centros porque así no podemos trabajar", ha señalado Sheila Gómez entre lágrimas.