Con el caldero vacío y las gradas repletas de basura, así quedó el parque mirador del Este, luego de que cientos de personas degustaran el sancocho más grande del mundo. Algunas cubetas aún permanecían llenas de sancocho.
Al menos seis empleados del ayuntamiento de Santo Domingo Este, trabajaban en la limpieza del área, tras las celebraciones de la preparación de lo que sería el sancocho más grande del mundo.