Máxima tensión en Ferraz contra Sánchez: otra vez gases, palos y disturbios
- hace 6 meses
«España es una, no 51», «Madrid será la tumba del sanchismo», «España no se vende», «¡Dejadnos pasar!»...
Y este 7 de noviembre volvió a darse con miles. Y mañana serán más.
La concentración, impulsada por redes sociales, fue convocada por Revuelta, un movimiento juvenil.
Este 6 de noviembre de 2023, el socialista Sánchez, que ve la que se le viene encima, ordenó a la policía disolver a los ciudadanos que protestaban pacífica pero airadamente ante la sede del PSOE, en la madrileña calle Ferraz. Para ello utilizaron desproporcionadamente palos y gases lacrimógenos.
Ya en la jornada de martes 7 la tensión era máxima y la gente se contaba por miles. Un pequeño grupo se separó del resto y cortó la Gran Vía.
Manifestantes y Policía en Ferraz este 7 de noviembre.
Así se vio el grupo que se desplazó por la Gran Vía madrileña cortando el tráfico y acompañado de un grupo de antidisturbios:
Fue a partir de las 22 horas cuando la cosa comenzó a ponerse seria de verdad. Algunos grupos, quien sabe si con infiltrados, se enfrentaron a la Policía y la calle Ferraz y aledaños se convirtieron en una auténtica batalla campal.
Y este 7 de noviembre volvió a darse con miles. Y mañana serán más.
La concentración, impulsada por redes sociales, fue convocada por Revuelta, un movimiento juvenil.
Este 6 de noviembre de 2023, el socialista Sánchez, que ve la que se le viene encima, ordenó a la policía disolver a los ciudadanos que protestaban pacífica pero airadamente ante la sede del PSOE, en la madrileña calle Ferraz. Para ello utilizaron desproporcionadamente palos y gases lacrimógenos.
Ya en la jornada de martes 7 la tensión era máxima y la gente se contaba por miles. Un pequeño grupo se separó del resto y cortó la Gran Vía.
Manifestantes y Policía en Ferraz este 7 de noviembre.
Así se vio el grupo que se desplazó por la Gran Vía madrileña cortando el tráfico y acompañado de un grupo de antidisturbios:
Fue a partir de las 22 horas cuando la cosa comenzó a ponerse seria de verdad. Algunos grupos, quien sabe si con infiltrados, se enfrentaron a la Policía y la calle Ferraz y aledaños se convirtieron en una auténtica batalla campal.