Ucrania: Mueren Múltiples Personas Tras El Último Ataque Ruso
- hace 7 meses
Las fuerzas rusas han bombardeado 118 localidades ucranianos, matando al menos a cuatro personas e hiriendo a 14.
En Jersón, en el sur de Ucrania, un proyectil ruso impactó cerca de edificios residenciales, matando a un empleado del gobierno municipal. Además, múltiples personas quedaron heridas, al igual que en las regiones del Donetsk y Kúpiansk.
Los vídeos indican que los ataques se realizaron mediante drones debido a la gravedad de los daños. En la región de Dnipró, en el noreste de Ucrania, un dron ruso mató a una mujer de 59 años e hirió a otras seis personas. Según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, un año y medio después del inicio de la guerra, la necesidad de ayuda humanitaria en Ucrania no para de crecer.
Unos 18 millones de ucranianos necesitan actualmente algún tipo de ayuda humanitaria. Las infraestructuras principales de Ucrania han sufrido graves daños, poniendo en peligro el acceso de la población a la electricidad, el agua, la calefacción y las telecomunicaciones. Esta situación es especialmente preocupante ante la llegada del invierno, momento en el que se espera que las temperaturas desciendan hasta los 20 grados bajo cero.
En Jersón, en el sur de Ucrania, un proyectil ruso impactó cerca de edificios residenciales, matando a un empleado del gobierno municipal. Además, múltiples personas quedaron heridas, al igual que en las regiones del Donetsk y Kúpiansk.
Los vídeos indican que los ataques se realizaron mediante drones debido a la gravedad de los daños. En la región de Dnipró, en el noreste de Ucrania, un dron ruso mató a una mujer de 59 años e hirió a otras seis personas. Según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, un año y medio después del inicio de la guerra, la necesidad de ayuda humanitaria en Ucrania no para de crecer.
Unos 18 millones de ucranianos necesitan actualmente algún tipo de ayuda humanitaria. Las infraestructuras principales de Ucrania han sufrido graves daños, poniendo en peligro el acceso de la población a la electricidad, el agua, la calefacción y las telecomunicaciones. Esta situación es especialmente preocupante ante la llegada del invierno, momento en el que se espera que las temperaturas desciendan hasta los 20 grados bajo cero.