El portavoz adjunto del PP en el Ayuntamiento de Bilbao, Carlos García, ha desenmascarado en 'La Retaguardia' el falso mito de que los 'nacionalistas moderados' del PNV son buenos gestores y no están salpicados por la corrupción. El edil popular ha explicado en detalle el llamado 'caso De Miguel'; una trama de corrupción en Álava que Íñigo Urkullu no detectó y que, cuando salió a la luz, le hizo manifestar que se sentía 'orgulloso' con la reacción de su partido. El caso se substancia, según sentencia judicial, en una trama de concursos públicos en la que los acusados habrían llegado a pedir comisiones de cien mil euros, tal y como han publicado El Mundo o Eldiario.es.

Carlos García ha denunciado el amiguismo que subyace en esta y otras tramas, en las que estarían involucrados cargos del Gobierno vasco. Según algunos medios, como El Mundo, hay una treintena de casos de corrupción política que ya están sentenciados o en la última fase de investigación.