Con retranca, muy a la gallega, Alberto Núñez Feijóo ha sacudido una mano de palos memorable al socialista Pedro Sánchez.
En los Cursos de Verano de El Escorial, ante la flor y la nata del PP, se ha pitorreado con gesto serio de las recientes propuestas económicas del todavía presidente del Gobierno.
Según el líder popular, que marcha ya con una holgada ventaja en las encuestas de cara de próximas elecciones generales, Sánchez nos propone ahora comer menor, porque según él los españoles compramos demasiados alimentos. Y para hacer frente a la crisis energética, todo lo que se le ocurre a Sánchez es que apaguemos la luz o desconectemos el aire acondicionado.
El presidente del Partido Popular ha acusado a Pedro Sánchez de "comprar paz parlamentaria" para "irse de vacaciones", tras haber anunciado nuevas medidas económicas en el Debate sobre el Estado de la Nación.
Y ha vaticinado que en septiembre continuarán "los problemas, las divisiones en la coalición, las tensiones con los socios y el incremento de precios".
Esto lo ha dicho en la clausura del XIII Congreso Autonómico del PP de Extremadura, que ha proclamado a María Guardiola como nueva presidenta de la formación en la región extremeña en sustitución de José Antonio Monago, quien llevaba 14 años al frente.
Feijóo ha asegurado que Sánchez acudió al debate del Congreso para "evitar la descomposición de la mayoría parlamentaria".
En este momento en el que el Ejecutivo es "más débil", según el líder de la oposición, Sánchez ha usado aquello que "les une siempre" y que pasa por "volver a subir los impuestos".
Subrayó que Sánchez ha subido los impuestos 24 veces desde que llegó a la Moncloa:
"Su voracidad fiscal no conoce límites".
Ha asegurado que ya conocen "la música" de estos nuevos impuestos temporales a la banca y a las energéticas y augurado que los van a pagar los consumidores.
"La receta de Sánchez para hacer frente a la crisis de incremento de precios es subir los precios".

"¿Se va a combatir la inflación subiendo la inflación?", se ha preguntado, al tiempo que ha ironizado con que este sea un "plan brillante" para estudiar en las facultades más prestigiosas de Economía.
"La verdad de la inflación incomoda" a Sanchez, que es un tipo de gobernante que solo quiere oír que todo lo hace bien, que el Gobierno acierta siempre y que cuando hay problemas siempre hay un culpable".
"Es el truco más viejo y más burdo del populismo".
Ha hecho referencia al momento en el que Sánchez comparó las políticas del PP con los curanderos: "Menos mal que él es el especialista",.
"Un Gobierno responsable es aquel que asume la realidad, hace un diagnóstico preciso y, en base a ello, busca el tratamiento adecuado. "Sánchez ha optado por el camino contrario, lleva meses negando la realidad".