Te gusten o no, hay que reconocer que los gatos son unos animales con enorme personalidad.
Aparecieron en la Tierra antes que los perros y que muchos animales que han llegado a ser domésticos, pero han sido uno de los últimos en convertirse en mascotas.
En el Antiguo Egipto los gatos eran adorados y el rapto o la venta de estos animales podía ser penado con la muerte, pues su labor como cazadores de ratas era muy valorado.
Y si el gato moría, todos los miembros de la familia se depilaban las cejas en señal de duelo.
El cerebro de un gato se parece en un 90% al de un ser humano. Tenemos más similitudes con ellos que con los perros.
Y la última y más llamativa: Los gatos obedecen mejor a las mujeres porque perciben mejor los sonidos agudos.
Aparecieron en la Tierra antes que los perros y que muchos animales que han llegado a ser domésticos, pero han sido uno de los últimos en convertirse en mascotas.
En el Antiguo Egipto los gatos eran adorados y el rapto o la venta de estos animales podía ser penado con la muerte, pues su labor como cazadores de ratas era muy valorado.
Y si el gato moría, todos los miembros de la familia se depilaban las cejas en señal de duelo.
El cerebro de un gato se parece en un 90% al de un ser humano. Tenemos más similitudes con ellos que con los perros.
Y la última y más llamativa: Los gatos obedecen mejor a las mujeres porque perciben mejor los sonidos agudos.
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