Programa de la televisión pakistaní en el que nada parece salirse de lo normal. El presentador del magacín Aamir Liaquat Husein conduce el espacio con agilidad mientras realiza preguntas sobre el Islam a los participantes. Los afortunados que acierten el cuestionario pueden llevarse a casa todo tipo de premios: coches, televisiones, electrodomésticos de última generación y en esta ocasión, esta pareja de concursantes, elegida de entre el público, se lleva a casa un bebé. Estas imágenes han creado gran revuelo a nivel internacional. Los niños entregados son recogidos por una entidad local benéfica llamada Chhipa. Este pequeño fue recogido de entre un montón de basura. Había sido abandonado y ahora tiene una nueva familia. "Es una forma de concienciar a la sociedad paquistaní sobre la necesidad de no abandonar a los bebés como si fueran animales", asegura el director de la asociación encargada de las adopciones. El director del programa Amán Ramadán (Paz en ramadán) no parece ver ninguna polémica, sobre todo después de los índices de audiencia conseguidos, y ya ha asegurado que en los próximos programas habrá más bebés como premio.