Comenzaron con una protesta por la muerte de un chico de 17 años el pasado domingo y la manifestación acabó con fuertes disturbios. Los antidisturbios intentan bloquear una zona del norte de Sao Paulo y recorren las calles disparando balas de goma para dispersar a un grupo de violentos encapuchados. El adolescente murió cuando la policía estaba registrando a uno grupo de jóvenes  por hacer ruido en la calle cuando, según las autoridades, el arma de uno de los agentes se disparó por error alcanzando al joven en el tórax. La protesta terminó con violentos enfrentamiento y con saqueos en los comercios. También incendiaron, al menos, cinco autobuses, dos camiones y bloquearon algunas carreteras.