Empieza el cole y con él las mochilas cargadas de libros. A pesar de las obligaciones escolares, el peso que carguen los niños en la espalda no debe superar el diez por ciento de su peso corporal. De esta forma se evitará que los pequeños sufran lesiones de espalda y que puedan parecer dolores crónicos cuando crezcan. Hacer ejercicio y llevar una dieta saludable también es recomendable para evitar disgustos en el futuro.