El calendario dirá que estamos a primeros de noviembre, que ya es Halloween y que la estación que nos toca es otoño, la de las hojas, el frío y las lluvias. Pero el tiempo indica que casi es verano. Es verdad que cambia a partir de la semana que viene pero por ahora, casi de verano. Por eso los que decidieron disfrutar de su vacaciones en otubre no dejan de aplaudir. Ahora, en las zonas costeras no hay masificaciones, así que uno tiene toda la playa casi para él. En los hoteles, se puede elegir habitación y a precios hasta un 70 por ciento más baratos. En el restaurante, las mismas tapas o platos, pero sin esperar colas. Cada vez son más los que piensan que, al haber dividido sus vacaciones, no se han equivocado.