Le Pen reconoce la derrota y anuncia una renovación del Frente Nacional
- hace 7 años
La ultraderechista Marine Le Pen ha encarnado la imagen de la derrota electoral. La líder del Frente Nacional ha reconocido ante sus seguidores en París su derrota contra el socioliberal Emmanuel Macron y ha anunciado una refundación de su formación para desempeñar su papel de primera fuerza de oposición al nuevo presidente.
“El Frente Nacional se ha comprometido a una alianza estratégica. El partido debe renovarse profundamente para estar a la altura de esta oportunidad histórica y de las expectativas de los franceses que se han expresado en esta segunda vuelta”, ha dicho.
“Propongo, pues, iniciar una profunda transformación para formar una nueva fuerza política que atraiga a los franceses, lo cual es completamente necesario para la recuperación del país. Pido a todos los patriotas a unirse a nosotros para participar en la batalla política decisiva que se inicia esta noche. En los próximos meses, más que nunca, Francia os va a necesitar. ¡Viva la República, viva Francia!”, ha añadido.
El Frente Nacional ha obtenido su mejor resultado histórico, aunque la derrota de Marine Le Pen es la peor en una segunda vuelta de unas presidenciales desde la que sufrió su padre en 2002.
“El Frente Nacional se ha comprometido a una alianza estratégica. El partido debe renovarse profundamente para estar a la altura de esta oportunidad histórica y de las expectativas de los franceses que se han expresado en esta segunda vuelta”, ha dicho.
“Propongo, pues, iniciar una profunda transformación para formar una nueva fuerza política que atraiga a los franceses, lo cual es completamente necesario para la recuperación del país. Pido a todos los patriotas a unirse a nosotros para participar en la batalla política decisiva que se inicia esta noche. En los próximos meses, más que nunca, Francia os va a necesitar. ¡Viva la República, viva Francia!”, ha añadido.
El Frente Nacional ha obtenido su mejor resultado histórico, aunque la derrota de Marine Le Pen es la peor en una segunda vuelta de unas presidenciales desde la que sufrió su padre en 2002.