Enfoque - Perú: los proyectos mineros y otros ‘dolores de cabeza’ de Humala
- hace 9 años
Los proyectos mineros de Las Bambas y Tía María centran la agenda política y social de Perú.
Aunque en las últimas horas dirigentes de las comunidades de la provincia de Cotabambas, en Apurímac, decidieron levantar la paralización que habían mantenido durante varios días, han reclamado al Ministerio de Energía y Minas una mayor información sobre los últimos cambios hechos a la concepción inicial del proyecto Las Bambas, al tiempo que han exigido talleres informativos para esclarecer las dudas sobre el tema ambiental.
Paralelamente, se ha conocido que la Justicia ha rechazado la petición de cese de prisión preventiva para Pepe Julio Gutiérrez, exdirigente del valle de Tambo, que lideró las protestas contra el proyecto minero Tía María.
El Gobierno peruano ha insistido en que actuará con mano de hierro ante cualquier hecho en torno a los proyectos mineros. La semana pasada al menos tres personas murieron y otras 15 resultaron heridas en diversas protestas. Las autoridades mantienen vigente el estado de emergencia en seis provincias del sureste del país.
Se trata de un nuevo capítulo que ha venido a catalizar el descontento ciudadano en Perú, que desaprueba cada vez con más claridad la gestión del presidente Ollanta Humala. Según las últimas encuestas, su aprobación cayó en cuatro puntos, pasó de 16 % a 12 %.
En esta nueva edición de Enfoque debatiremos sobre la situación creada en torno a los tan cuestionados proyectos mineros, y hablaremos sobre la caída de la popularidad presidencial que afecta también a la primera dama, Nadine Heredia.
La primera dama peruana está envuelta en permanentes acusaciones por el presunto delito de lavados de activos que podrían estar detallados en unas agendas que llevan su nombre. El Congreso la ha incluido en una nueva investigación por irregularidades en las contrataciones con el Estado.
En alusión a los conflictos mineros, el médico peruano Luis Fernando García considera que a nivel de población hay “movimientos radicales de izquierda que complican el panorama y provocan muertos.”
A lo que Raúl Luza Luyo, miembro del Movimiento de Afirmación Social (MAS) de Perú, responde: “Los muertos son nuestros y los millones de las multinacionales.”
La experta en América Latina Sonia Alda, sentencia que “es un problema histórico, dado el nivel de conflictividad social con altos niveles de violencia por ambas partes”.
Gabino Gamarra, miembro del Partido Comunista del Perú, insiste en que “la minería debe marchar de la mano del medio ambiente, de la educación, de la agricultura… eso no se ha hecho en todo este tiempo y podemos encontrar las causas de los levantamientos porque no se escucha al pueblo”.
Aunque en las últimas horas dirigentes de las comunidades de la provincia de Cotabambas, en Apurímac, decidieron levantar la paralización que habían mantenido durante varios días, han reclamado al Ministerio de Energía y Minas una mayor información sobre los últimos cambios hechos a la concepción inicial del proyecto Las Bambas, al tiempo que han exigido talleres informativos para esclarecer las dudas sobre el tema ambiental.
Paralelamente, se ha conocido que la Justicia ha rechazado la petición de cese de prisión preventiva para Pepe Julio Gutiérrez, exdirigente del valle de Tambo, que lideró las protestas contra el proyecto minero Tía María.
El Gobierno peruano ha insistido en que actuará con mano de hierro ante cualquier hecho en torno a los proyectos mineros. La semana pasada al menos tres personas murieron y otras 15 resultaron heridas en diversas protestas. Las autoridades mantienen vigente el estado de emergencia en seis provincias del sureste del país.
Se trata de un nuevo capítulo que ha venido a catalizar el descontento ciudadano en Perú, que desaprueba cada vez con más claridad la gestión del presidente Ollanta Humala. Según las últimas encuestas, su aprobación cayó en cuatro puntos, pasó de 16 % a 12 %.
En esta nueva edición de Enfoque debatiremos sobre la situación creada en torno a los tan cuestionados proyectos mineros, y hablaremos sobre la caída de la popularidad presidencial que afecta también a la primera dama, Nadine Heredia.
La primera dama peruana está envuelta en permanentes acusaciones por el presunto delito de lavados de activos que podrían estar detallados en unas agendas que llevan su nombre. El Congreso la ha incluido en una nueva investigación por irregularidades en las contrataciones con el Estado.
En alusión a los conflictos mineros, el médico peruano Luis Fernando García considera que a nivel de población hay “movimientos radicales de izquierda que complican el panorama y provocan muertos.”
A lo que Raúl Luza Luyo, miembro del Movimiento de Afirmación Social (MAS) de Perú, responde: “Los muertos son nuestros y los millones de las multinacionales.”
La experta en América Latina Sonia Alda, sentencia que “es un problema histórico, dado el nivel de conflictividad social con altos niveles de violencia por ambas partes”.
Gabino Gamarra, miembro del Partido Comunista del Perú, insiste en que “la minería debe marchar de la mano del medio ambiente, de la educación, de la agricultura… eso no se ha hecho en todo este tiempo y podemos encontrar las causas de los levantamientos porque no se escucha al pueblo”.