Los griegos recuerdan con nostalgia y enfado los Juegos Olímpicos de Atenas

  • hace 10 años
Diez años después de la celebración de los Juegos Olímpicos de Atenas, la mayoría de las instalaciones construídas para la ocasión se encuentran totalmente abandonadas.

Muchos griegos se preguntan por qué no se diseñó un plan para el aprovechamiento de estas instalaciones que hace una década les hicieron sentir tan orgullosos.

Razones no les faltaron. Durante los 16 días que duraron los Juegos todo salió a la perfección: las competiciones se desarrollaron sin problemas y los atletas griegos cosecharon un número récord de medallas.

Stella Ntala trabajó como voluntaria durante el evento.

“La sonrisa de la gente a mi alrededor, ese es el mejor recuerdo que tengo, explica Ntala. Nunca olvidaré lo orgullosos que nos sentíamos en 2004. Espero que el futuro sea mejor, que Grecia sea país un mejor gracias a estos Juegos”.

Pero para algunos griegos Atenas se convirtió en una capital mejor gracias a los Juegos Olímpicos. Esa es la opinión de Kostas Kartalis, uno de los responsables del evento. Kartalis asegura además que sí se había diseñado un plan de utilización posterior de las instalaciones.

“Sí existía un plan para la utilización de estas instalaciones pero el gobierno elegido tras los Juegos decidió no implementarlo por razones políticas. Perdimos esa oportunidad. Grecia no consiguió mantener vivo el espíritu de los Juegos. Por esa razón estas instalaciones están hoy abandonadas”, asegura Kartalis.

Durante la última década el coste real de los Juegos ha sido objeto de polémica entre los políticos con estimaciones que varían entre los 5.000 millones y los 27.000 millones de euros.

A la pregunta de si los Juegos desencadenaron la crisis en Grecia, Stratos Safioleas, portavoz del evento en 2004, responde:

“Aquellos que dicen que los Juegos Olímpicos provocaron la crisis económica no fueron buenos estudiantes de matemáticas en el colegio. La inversión realizada para organizar en 2004 los Juegos fue de 8.000 millones de euros. Un año después la deuda griega era de 320.000 millones de euros”.

La piscina olímpica, el velódromo y las canchas de tenis sirven apenas para entrenamientos. El estadio cubierto es utilizado regularmente por el equipo de baloncesto Panathinaikos. Solo el centro de bádminton, situado fuera del complejo olímpico, ha sido transformado en un teatro.

“Si en 2004 Grecia ganó la batalla, diez años después parece haber perdido la guerra. Del orgullo nacional se ha pasado a la decepción y al enfado. A pesar de ello, la recuperación de estas instalaciones podría contribuir a poner fin a la crisis”, explica Apostolos Staikos, periodista de euronews.