EEUU: 4 muertos en un tiroteo en la base militar de Fort Hood
- hace 10 años
4 muertos y 16 heridos. Es el resultado del tiroteo registrado en la mayor base militar de Estados Unidos. Uno de los militares abrió fuego contra sus compañeros con una pistola por razones aún desconocidas. Hace tres años estuvo destinado en Irak y sufría depresión desde entonces. No hay indicios de atentado.
General Mark Milley:
“ El tirador ha muerto de un disparo hecho por él mismo. Con los datos que tenemos en estos momentos, no hay ningún elemento que permita conectar este incidente con un acto de terrorismo, aunque no descartamos ninguna hipótesis. La investigación sigue abierta”
La base de Fort Hood ha estado en alerta durante varias horas, el tiempo que ha durado el incidente. Obama fue informado en tiempo real.
Barack Obama, Presidente de EEUU:
“ Las personas en esa base han hecho muchos sacrificios por nuestra libertad. Muchos de ellos han estado varias veces en Irak y Afganistán, donde han servido con valor y distinción. Nos rompe el corazón que algo así haya podido volver a pasar”
Fort Hood ya fue escenario el 5 de noviembre de 2009 de una de las matanzas más sangrientas ocurridas en suelo estadounidense, cuando 13 soldados murieron y otras 32 personas resultaron heridas a manos de un psicólogo musulmán del Ejército estadounidense.
General Mark Milley:
“ El tirador ha muerto de un disparo hecho por él mismo. Con los datos que tenemos en estos momentos, no hay ningún elemento que permita conectar este incidente con un acto de terrorismo, aunque no descartamos ninguna hipótesis. La investigación sigue abierta”
La base de Fort Hood ha estado en alerta durante varias horas, el tiempo que ha durado el incidente. Obama fue informado en tiempo real.
Barack Obama, Presidente de EEUU:
“ Las personas en esa base han hecho muchos sacrificios por nuestra libertad. Muchos de ellos han estado varias veces en Irak y Afganistán, donde han servido con valor y distinción. Nos rompe el corazón que algo así haya podido volver a pasar”
Fort Hood ya fue escenario el 5 de noviembre de 2009 de una de las matanzas más sangrientas ocurridas en suelo estadounidense, cuando 13 soldados murieron y otras 32 personas resultaron heridas a manos de un psicólogo musulmán del Ejército estadounidense.